¿Propaganda nacionalista norteamericana? Podríamos pensar inmediatamente que sería lo último que iríamos a ver a una sala de cine como búsqueda de entretenimiento. Marvel y Paramount Pictures, conscientes de la situación, decidieron activar la franquicia de El Capitán América con una lectura un tanto distinta (y conveniente) para ser digerida para el público de hoy en día que difícilmente podría dejarse llevar por una historia lineal de superhéroes orquestada como parte de una campaña publicitaria alrededor de la milicia americana. El Capitán América es uno de los héroes clásicos de Marvel creado en 1941 por Joel Simon y el dibujante Jack Kirby y constituye uno de sus personajes "clásicos" dentro de su universo. El singular personaje fue creado para sublimar el patriotismo aliado durante la Segunda Guerra Mundial sumándole características un tanto tradicionales dentro del grupo de superhéroes.
Esta versión de El Capitán América (con excelentes valores de producción por cierto) es dirigida por el veterano Joe Johnston quien tiene como misión principal el convertir la película en el último eslabón dentro de la cadena de superhéroes que participarán en la esperada producción The Avengers (dirigida en 3D por Joss Wheldon) con fecha de estreno para mayo del 2012 la cual reunirá a los protagonistas centrales de Marvel en un solo filme. Después de las presentaciones de IronMan, Thor, Hulk, Hawkeye y Black Widow en anteriores películas habría que introducir al lengendario Capitán América a las nuevas generaciones quienes han consumido las exitosas películas coproducidas por Marvel por lo que esta producción, específicamente, sirve casi como un prólogo a lo que veremos el próximo año en Los Vengadores. Pero no me mal interpreten aquí.
En la cinta de El Capitán América tenemos suficiente información como para atestiguar tranquilamente el génesis del superhéroe, anécdota situada justo antes de que los Estados Unidos entrarán al conflicto bélico que implicaba su participación en la Segunda Guerra Mundial, en donde un escuálido y asmático jovencito del Brooklyn de nombre Steve Rogers (Evans) es víctima constante de ataques por parte de los "poderosos" del barrio hasta que un buen día decide alistarse en el ejército norteamericano y en donde es adoptado por un inteligente científico (Stanley Tucci) quien queda un tanto impresionado por la astucia y valentía más que por su aspecto físico.
Una vez integrado al ejército, Steve, a su vez, es objeto de un experimento orquestado por Howard Stark (Dominic Cooper), quien se convertirá en el padre de Tony (IronMan), convirtiéndolo en una máquina humana, una especie de súperhombre representando al soldado ideal (en todo el sentido de la palabra) listo para combatir en las líneas enemigas lidereadas por Hitler, aquí representado por Johann Schmidt (Hugo Weaving), a su vez un mismo rebelde del Tercer Reich. El resto de Capitán América es puro entretenimiento clásico de superhéroes, una ambientación nostálgica que nos remite a los antiguos programas de televisión protagonizados por este tipo de personajes.
Johnston desarrolla clásicamente una aventura que incluye espionaje internacional, grandes batallas y arquetípicos roles caracterizados por talentosos actores. Toby Jones como el Dr. Zola, Haylee Atwell como Peggy Carter haciendo "algo más" de lo que comúnmente realizan las "damas en peligro", Tommy Lee Jones proveyendo de sentido de humor en algunas secuencias. Capitán América equivale a estar disfrutando una experiencia en donde estamos conscientes de que la producción es de primer nivel pero en la que en todo momento tenemos también la sensación de que en alguna otra película ya lo hemos experimentado. Cabe aclarar que la cinta no cuenta con los elementos de riesgo que han reinventado en los últimos años a personajes favoritos como Batman o El Hombre Araña pero aquí ¿qué importa? estamos hablando de la narración más tradicional y clásica dentro del género. El desenlace y la confrontación final se sienten un tanto formulaicas y predecibles, pero hacia la conclusión nos queda claro que Capitán América cumple con la función de hacernos recordar lo que va alrededor de los clásicos superhéroes con los cuales crecimos.
Por: Twitter @oscaruriel
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